Algo de historia de los Vinos de Zaragoza
El vino más conocido históricamente de la provincia de Zaragoza era el Cariñena, que era conocido gracias a su rusticidad, alto grado y poca finura.
En los tiempos actuales, gracias a la tecnología enológica han sido afinados hasta convertirlos en vinos potentes, sabrosos y muy buscados.
Ya en el siglo III A.C, los habitantes de la Ciudad romana de Carae, actual Cariñena, bibían vino mezclado con miel.
En 1415, el Rey Fernando I de Aragón, llevó vinos de Cariñena en un viaje que hizo a Niza, para dar a conocer dicho vino.
En 1585, el Rey Felipe II fue recibido en Cariñena con dos fuentes de vino, tinto y blanco.
En 1696 se aprobó el Estatuto de la Vid en Cariñena, para limitar las plantaciones según la calidad de la tierra.
En 1887 se inauguró el ferrocarril de vía estrecha Cariñena – Zaragoza, como consecuencia del desarrollo vinícola, que facilitó la exportación de vino, principalmente a Francia.
En 1891 se celebró el primer congreso vitivinícola de España, muy cerca de Cariñena, en Zaragoza, gracias a la actitud pionera de dicha región.
En 1909, el Rey Alfonso XIII otorgó a Cariñena el título de Ciudad en reconocimiento a su legado histórico y su lucha contra la filoxera.
Ya en 1932, Cariñena recibió la distinción de Denominación de Origen.



